Diciembre de 1978. Pancho Sá, por entonces un tipo ya curtido en el fútbol grande y en alcanzar éxitos deportivos importantes, quedó cautivado como si fuera un pibe de inferiores por el espectáculo único en el mundo que es el Jugador Nro. 12 llenando y alentando a Boca en la Bombonera.
Tener una hinchada así en una cancha así, es una bendición de la vida que llena de alegría y motivación a cualquier ser humano. Como le pasó a Pancho.
Fuente: revista El Gráfico número 3088 correspondiente al 12 de diciembre de 1978.