¿Qué haría cualquier Passucci para evitar que le hagan un gol a Boca? ¿Y qué cosas seríamos capaces de hacer si ese probable gol a Boca es de River? La Passucci no avala la violencia, pero tampoco avala que un jugador de River se vaya sólo con pelota dominada hacia el arco de Casa Amarilla. Así que no nos queda otra que rendirnos ante el Passucci Krupo por lo hecho aquel domingo 26 de marzo de 2006 cuando decidió inmolarse para evitar la derrota en un superclásico. Porque ese contragolpe millonario hubiera puesto las cosas dos goles abajo y bastante más difíciles. Aunque con River enfrente, nunca se sabe...
El Passucci Krupo corrió más de 30 metros para dar alcance a su presa. Los corrió a toda velocidad y empujado por el Nro. 12 para cortar de raíz ese peligroso avance. Y cuando lo tuvo a tiro, nada de camiseteos o agarrones tibios. No señor. Ni siquiera un tackle que deje la mínima posibilidad al rival de escaparse con vida. Patada voladora a cortar por el medio y a otra cosa.
La corajeada del Mellizo buscando el penal en tiempo cumplido y el empate de Palermo fueron posibles sólo por el accionar kamikaze de Krupoviesa. A partir de ese día, el Passucci Krupo.