23 de junio de 1991, autopista 25 de Mayo. Las frías estadísticas dicen que el Clausura 91 que Boca obtuvo en forma invicta no se cuenta oficialmente como una estrella. Perfecto. Pero los que en aquel entonces dábamos como mínimo un brazo (?) por ganar un campeonato local, no entendemos de esas cosas.
Esa mañana hubo que levantarse bien temprano porque a las 11 de la mañana Boca visitaba a San Lorenzo en cancha de Vélez. Y si la autopista fue un caos a la ida, a la vuelta fue un verdadero infierno de autos, motos, bocinazos y camiones repletos de boquenses que volvían hacia la Bombonera a festejar.
Hoy con la panza llena de Copas, podemos cuestionarnos a nosotros mismos por festejar antes de tiempo. Pero aquella mañana el corazón del hincha de Boca le ganó a la razón. Como más nos gusta. Como debe ser.
Fuente: revista El Gráfico número 3742 correspondiente al 25 de junio de 1991.