Los mitómanos mienten compulsivamente. Lo hacen todo el tiempo. Y lo peor de sus mentiras no es la mentira en sí mismo, sino el peligro de que alguien pueda creer que esas mentiras son verdades. O algo que es aún peor. Que todo el mundo tenga claro que el mitómano miente, pero nadie le dice nada. O por comodidad, o por conveniencia.
Así las cosas, nos hemos acostumbrado a que algunos medios de comunicación reproduzcan en titulares gigantes las mentiras de Ramón Díaz. Obviamente no las cuestionan, no le repreguntan nada. Son simpáticas, je (?) y las reproducen. Y creemos que callar ante una mentira es en el fondo, avalarla. Algo que no está permitido en La Passucci.
Por ese motivo es creemos conveniente dudar de todo lo que diga este señor. De todo. Vamos a un ejemplo:
Noviembre de 1997. Típica nota a Ramón Díaz en donde le hacen mil preguntas (?) sobre Boca para que se despache a gusto. No hay drama. El drama viene cuando empiezan las mentiras.
Fuente: revista El Gráfico número 4076 correspondiente al 18 de noviembre de 1997.
¿De qué mentiras estamos hablando? De una muy grande. Quizás la más grande de todas. Nos referimos a cuando dice que Labruna jamás hubiera dirigido a Boca. Y no es un capricho nuestro. Veamos qué decía Labruna al respecto:
Hace un tiempo subimos un post dónde mostrábamos las pruebas de que el último deseo de Ángel Labruna antes de morir fue dirigir a Boca. ¿Y qué hizo un grupo de hinchas de River? En vez de enojarse con el Feo, se enojaron con nosotros, nos insultaron en un foro riverplatense acusándonos de photoshopear la nota, juntaron plata, entraron a MercadoLibre, compraron la revista y... Y no sabemos qué pasó después porque debe haber sido un baño de realidad durísimo de asimilar.
Así las cosas, nos hemos acostumbrado a que algunos medios de comunicación reproduzcan en titulares gigantes las mentiras de Ramón Díaz. Obviamente no las cuestionan, no le repreguntan nada. Son simpáticas, je (?) y las reproducen. Y creemos que callar ante una mentira es en el fondo, avalarla. Algo que no está permitido en La Passucci.
Por ese motivo es creemos conveniente dudar de todo lo que diga este señor. De todo. Vamos a un ejemplo:
Fuente: revista El Gráfico número 4076 correspondiente al 18 de noviembre de 1997.
¿De qué mentiras estamos hablando? De una muy grande. Quizás la más grande de todas. Nos referimos a cuando dice que Labruna jamás hubiera dirigido a Boca. Y no es un capricho nuestro. Veamos qué decía Labruna al respecto:
Hace un tiempo subimos un post dónde mostrábamos las pruebas de que el último deseo de Ángel Labruna antes de morir fue dirigir a Boca. ¿Y qué hizo un grupo de hinchas de River? En vez de enojarse con el Feo, se enojaron con nosotros, nos insultaron en un foro riverplatense acusándonos de photoshopear la nota, juntaron plata, entraron a MercadoLibre, compraron la revista y... Y no sabemos qué pasó después porque debe haber sido un baño de realidad durísimo de asimilar.
Bueno, hoy traemos nuevo material inédito que no busca alterar a nadie (?) sino colaborar en esta cruzada contra la mentira y a favor de la verdad.
Dos meses antes de aquella nota que subimos tiempo atrás, Labruna ya reconocía derecho viejo, sin metáforas ni retórica alguna, no tener ningún inconveniente, ningún tabú en calzarse el buzo de DT de Boca.
Fuente: revista Estadio número 105, página 16, correspondiente al martes 26 de abril de 1983
¿Por qué Labruna aceptaba ser DT en 1983 de un equipo que jamás lo quiso tener como DT? ¿Habrá influido el destrato que sufrió en River durante sus últimos años? ¿Los silbidos, monedazos, insultos y tomas de Hall de 1981? Creemos que sí. Pero no lo podemos asegurar.
PD:
Por si nuevamente los hinchas de River elijen ser incrédulos y quieren autoconvocarse para comprar la revista en MercadoLibre o Parque Rivadavia, les adjuntamos un escaneo de la nota completa y también la tapa para que puedan encontrarla más fácil y sin perder tanto tiempo (clic para ampliar).
Fuente: revista Estadio número 105 correspondiente al martes 26 de abril de 1983.
Labruna hubiera sido DT de Boca sin ningún problema. Lo dijo Angelito. Así que todo nuestro respeto con Labruna. No así con los mitómanos que quieren crear un mundo de fantasía lleno de mentiras.
Para ellos, todo nuestro desprecio y un baño de realidad. A los mitómanos se los combate con la verdad. Duela a quien le duela.