Un chiste que al mismo tiempo no es ningún chiste. Si algo caracterizó a Boca a lo largo de la historia es que sus equipos, los de más alto vuelo futbolístico y los que no daban tres pases seguidos, deben cumplir con un mandamiento sagrado: transpirar la camiseta. Nuestra camiseta azul y oro. Esforzarse, jamás darse por vencido, luchar hasta el final y si toca perder, vender carísima la derrota.
El Boca de la temporada 1985/86 dirigido por Marito Zanabria cumplía con creces ese requisito y obligó al chiste / reconocimiento de una revista. Nosotros agradecidos.
Fuente: revista El Gráfico número 3467 correspondiente al 18 de marzo de 1986.