15 de septiembre de 1985, cancha de Huracán. Boca visita a Huracán y lo derrota 2 a 1 por la primera rueda de la temporada 1985/86. Un partido grabado en nuestros corazones porque tuvo todos los condimentos para ser un partido Passucci. Por ahí le faltó que Boca tuviera tres o cuatro expulsados, pero no todo se puede en la vida (?).
La cosa es que el empate de Boca fue obra de Roberto Passucci. Empate demorado ya que el empuje en las tribunas y en el campo de juego tuvo su recompensa recién a los 35 minutos del segundo tiempo.
Y si un gol costó tanto conseguirlo sería de tibios festejarlo a la pasada. No señor. A colgarse del alambrado, a quedar cara a cara jugador e hincha y gritarlo con alma y vida. A lo Boca. Quedaban diez minutos., tiempo de sobra para que Boca diera vuelta el partido. Cómo no tomarse entonces 30 o 40 segundos para que jugadores e hinchas se unieran en el festejo.
Roberto escucha el grito del hincha. Y el hincha escucha el grito de Roberto. Y entre tanto barro y lluvia, hasta nos cuesta poder darnos cuenta quien es quien.