1 de noviembre de 1981, estadio Monumental. Por la primera ronda del Nacional, Boca visita a River y termina rescatando un milagroso empate tras el 2 a 2 convertido por Diego de penal en la última jugada del partido. Pero acá lo que nos convoca es otra cosa (?).
Promediando el segundo tiempo, el DT millonario Don Alfredo Di Stéfano, tuvo la brillante idea de reemplazar a Ramón Díaz. Decimos brillante porque la salida de Díaz nos regaló una estruendosa silbatina de La -1 para con su delantero goleador. ¿Por qué? Vaya a saber Dios. Siempre tendrán un motivo a mano para silbar a un jugador propio.
El tema es que tuvo que salir Passucci a bancarle los trapos al riojano. Si será grande Roberto, si le sobrará paño y espaldas, que no se le cayeron los anillo para poner el pecho por Díaz..
Fuente: revista Súper Boca número 10 correspondiente al 3 de noviembre de 1981.