Desde que empezamos a demostrar lo poco seguidor que es el hincha de River, su falta de aliento y apoyo incondicional tanto en el triunfo como en la derrota, hemos recolectado todo un catálogo de excusas. Que llovía mucho contra Lanús en el 2002, que estaba inundado contra Boca en el 2000, que hacía frío en 1967 y por eso se vendieron 391 entradas contra Unión, que jugaba con suplentes en el Nacional 1982, que le huelga en 1983, que ya estaba eliminado contra Colo Colo en la Libertadores 2007, que había camarilla en 1971. Y así podríamos seguir dos horas.
Y como un gesto de buena voluntad hacia esa gente que exprime su cerebro tratando de explicar lo inexplicable, aportamos una nueva excusa: la violencia en el fútbol en 1984.
3 de junio de 1984, cancha de Vélez. River recibe a Independiente por la primera rueda del Metro 84 con un estadio prácticamente vacío.
Fuente: revista El Gráfico número 3374 correspondiente al 5 de junio de 1984.
Ojo, es verdad que en aquel momento de la historia la violencia había alejado a gran parte del público de las canchas. Pero de ahí a juntar apenas 8.000 personas en un River - Independiente, nos parece demasiado.
Y cómo en La Passucci no nos gusta dejar detalles librados al azar, quisimos ver la recaudación de Boca aquel domingo y de paso pegarle una mirada a la tabla de posiciones pensando en que tal vez un River en los últimos puestos nos ayude a entender semejante poca convocatoria para su clásico. contra Independiente
Fuente: revista El Gráfico número 3374 correspondiente al 5 de junio de 1984.
Fuente: revista El Gráfico número 3374 correspondiente al 5 de junio de 1984.
Pero no. Boca en cancha de Temperley recaudó más que River-Independiente. Y la tabla nos muestra a un River bien acomodado en comparación con el turbulento (?) Boca de aquel año.
La verdad, no nos sorprende. Cuando los Passarella, Amadeo, Labruna, Gallego, Merlo y tantos otros dicen a lo largo de la historia “el hincha de River es muy exigente” se refieren a este tipo de actitudes. Dejar una cancha vacía sin importar estadio, rival y campaña. Ni hablar cuando Turnes dice públicamente que tuvieron que empezar a regalar entradas para no seguir pasando este tipo de papelones.
Así que ya saben (?). A partir de ahora, el hincha millonario tiene piedra libre para empezar a usar una nueva excusa: “ese día no fuimos a la cancha por la violencia en el fútbol”.