25 de marzo de 2010, Bombonera. No hay nada más lindo que las tradiciones boquenses. Y si son refregadas delante de la cara de River, mucho mejor. Como pasó por ejemplo en el superclásico del Clausura 2010, suspendido por lluvia el domingo 21 de marzo.
En la reanudación cuatro días más tarde, el Pizzero y la Novia hicieron su entrada triunfal y ocuparon el centro de una tribuna boquense que fue un verdadero carnaval antes, durante y después del triunfo 2 a 0.
No hubo un campeonato para festejar pero sí una paternidad histórica que se mantiene vigente con el correr de los años. Tan vigente como Pedrín, la Novia y el aliento incondicional del Jugador Nro. 12.