Mediados de la década del 60. La nota confirma que el mítico Racing de Pizzutti, campeón local, de América, del Mundo e invicto durante 39 encuentros, cantaba el Himno de Boca antes de salir al campo de juego para jugar sus partidos. Costumbre que quedó adoptada como cábala a raíz de los buenos resultados obtenidos.
La pregunta que nos hacemos es por qué motivo un día alguien en ese vestuario de Racing decidió empezar a cantar las estrofas del Himno boquense antes de jugar, sin que ello, esa primera vez, sea tomado como algo que trajera buena suerte.
Cosas como ésta, o como que los jugadores del Santos de Pelé cantaran “Dale Boca” en el túnel antes de salir a los partidos, demuestran la mística, la fuerza, la motivación que inspira Boca Juniors. Y esa mística, en este caso representada por la fuerza de su Himno, es la que evidentemente servía de arenga para los jugadores de la Academia.
Fuente: revista El Gráfico número 3839 correspondiente al 4 de mayo de 1993.