domingo, 2 de noviembre de 2014

Una hinchada que mete miedo 1986

23 de febrero de 1986, Bombonera. En pleno vestuario local tras ganarle 4 a 3 a Huracán en la segunda rueda de la temporada 1985/86, el Julio Olarticoechea se animaba a todo, incluso a pelear un campeonato en el que River desfilaba. ¿Y con qué armas el Vasco se animaba? Con dos. La Bombonera y la hinchada de Boca. Dos de las patas que sostienen nuestra identidad y mística a lo largo de la historia.
El Vasco no dijo nada nuevo. Que el piso se mueve, que el aliento aturde, que es el espectáculo más lindo del mundo y que la hinchada de Boca mete miedo. Una constante que cientos y cientos de jugadores de Boca e incluso rivales han reconocido siempre. No todos pueden decir lo mismo.
Fuente: revista El Gráfico número 3464 correspondiente al 25 de febrero de 1986 (clic para ampliar).