sábado, 31 de diciembre de 2011

Los premios Passucci 2011

Llegó la hora de la verdad. Los premios Passuccis 2011, en su primera edición, esperan ansiosos ser entregados a sus ganadores. Ganadores que seguramente tienen más que merecido llevarse la estatuilla y lucirla orgulloso delante de sus amigos y colegas.
Así que puntualmente en día y hora señalados, se cerraron las mesas de votación y empezó el escrutinio de los 1.015 votantes que cumplieron con su obligación cívica.  Analicemos a fondo los resultados de esta verdadera fiesta de la democracia (?).

Passucci de Plata a la “Mentira del año”
En un rubro bastante parejo desde el vamos, se impuso con el 36% el emotivo “Premio al aliento” que le dio Olé al hincha de River en la Bombonera. Porcentaje que ojalá sirva no sólo para seguir mintiéndole motivándolo, sino para que Olé no baje los brazos, aunque eso signifique llamar aliento a quedarse mudos durante 90 minutos. Cosa que pasó aquel histórico 15 de mayo de 2011 en la Bombonera. Nos parece un gran aporte entregar este Passucci de Plata. Es nuestro granito de arena en la acelerada racinguización del hincha de River.
Segundo y algo despegado quedó finalmente “Un River Nacional y Popular” de Clarín con el 27%, delirio nota que había arrancado a todo vapor, pero se quedó sin nafta sobre el final.
Si tenemos que hablar de decepción, hay que hablar de “River Patria” de Olé, la movida para embanderar todos (?) los balcones con los colores de River. No hubo balcones embanderados, tampoco hubo votos. Apenas el 6%.

Passucci de Plata a la “Superproducción del año”
Sin dudas, el rubro más peleado. Probablemente porque acá había material que hasta haría caer de culo al mismísimo Steven Spielberg. Apenas 15 votos separaron al ganador del escolta, ambas superproducciones de Olé. Diferencia que en más de 1.000 votos, es apenas un 1%. Tremendo (?).
Un fuerte aplauso al dramático vencedor “Matías es de película” con 346 votos (34%). Y enorme pena imaginamos tras el esfuerzo y la logística de “En las malezas mucho más”, el desopilante video que mostraba a los hinchas de River en Corrientes cruzando un campito con yuyos a la altura de la rodilla, pero en donde supuestamente había víboras yarará. Todo por ver a River ya que como nos repiten día y noche, la pasión no sabe de categorías. Ojo, capaz que si una víbora picaba a alguno, el morbo hubiera volcado la elección. Pero no pudo ser. De todas maneras, gran perfomance con 331 votos.
La emoción demasiado light de “Un Pelado querido” terminó en el fondo de la tabla con 80 votos. Lo que indicaría que a nuestro público le gusta el drama, pero salpicado con algo de suspenso o acción. Para tener en cuenta durante 2012 eh...

Passucci de Plata a la “Tapa del año”
Acá había un claro caballo del comisario que cumplió con las expectativas previas. Así que la tapa/expresión de deseo/desahogo/anhelo “Ascendió River” termin{o arrasando con el  58% (585  votos).
Lejísimos quedó la gloriosa humareda de Carlos Sánchez con “Los hinchas van a todos lados con nosotros” aquel lejano 23 de agosto. Fecha en la cual sólo se había jugado ¡una! fecha de la B Nacional.  De todos modos, 185 votos son 185 votos y significaron el 18%.

Passucci de Plata al “Periodismo partidario”
Si de inflar y defender a River se trata, este premio calculamos que quedó en las mejores manos. Por eso seguramente el 29% no dudó galardonar a la épica “Polémica: el escudo de River”, la editorial de Farinella explicando por qué el escudito de River iba a quedar grabado a fuego junto a los 20 equipos de Primera A en la web de Olé.

Una injusticia dirá usted amigo Passucci, pero 298 votos evidentemente premiaron el esfuerzo de un diario que si algo hace bien es sostener anímicamente al simpatizante riverplatense.
Quedó cebollita el no menos épico “¿Juega mejor River en la B que Boca en la A?”, el debate que se instaló desde varios medios pero que quedó inmortalizado en la pantalla de FoxSports. Un 24% que lamentablemente (?) no alcanzó.

Passucci de Plata a la “Operación de prensa”
En un año donde si algo sobró fueron las operaciones de prensa, los votantes se volcaron masivamente por la avanzada para que sí o sí vuelvan los visitantes a la B. Algo que no estuvo tan mal ya que nos regaló momentos mágicos como ver al presidente de Merlo y a la gerenciadora de Ferro quejándose por la devolución de entradas del público millonario. Pero lo justo es justo, y 387 votos (38%) terminó siendo decisivo.

Bastante lejos con el 20% quedó la manija para que el Monumental vuelva a ser habilitado para 60.000 espectadores. Algo que tampoco terminó siendo tan jodido, ya que el partido contra Patronato el 11 de diciembre nos mostró casi la mitad de los tribunas vacías. Como corresponde.

Passucci de Plata a la “Frase del año"
Acá hubo un duelo de titanes entre dos pesos pesados. Estamos hablando del espadeo de “La B se parece al Calcio” con 441 votos (43%) frente al indeleble “Los hinchas de River fuimos muy pelotudos” con 265 sufragios (26%). La barrileteada de Almeyda pisó con todo y se lleva más que merecidamente esta estatuilla.
Nos parte el alma ver que el “Jugadores con años en Primera nunca vivieron esto” haya sacado sólo 3 votos. Era nuestra gran apuesta tras la frase de Lucas Ocampos post 7-1 con Atlanta y en medio de escenas de euforia tipo “Héroes”.... no pudo ser.

Passucci de Plata a la “Mejor labor del Jugador -1”
En un año cargado de papelones protagonizados, el Jugador -1 traspasó todos los límites. Los "Golpes a jugadores durante partido con Belgrano" recolectaron 352 votos, o sea el 35%. Guarismos que lo hicieron acreedor a la estatuilla de plata y por qué no, al asombro de todo el planeta mientras se veían las imágenes por TV. Una noche que jamás olvidaremos.
Y cuando pensamos que ya no se podía caer más bajo, vino a los tres días una labor que peló 199 votos (20%): los "Destrozos, saqueos, e incendio de estadio propio". Ítem que, debemos confesar, fue el que votó la plana mayor de La Passucci junto a los 12 Apóstoles en unanimidad absoluta. Pero aceptamos esta derrota (?).

Passucci de Plata al “Papel mas triste en medios de comunicación”
Por más que nos duela, hay que reconocer que acá hubo afano. El 59% de Farinella aplastó a todos los rivales que le pusimos en el camino. Estamos hablando de nada menos que 596 votos. Imaginamos la cara desencajada de Distassio al verse a años luz con 138 votos (14%).
 

PASSUCCI DE ORO 2011
La verdad, en La Passucci no sabemos si reir o llorar. El que más porcentaje sacó, el que más votos juntó, el que más diferencia sacó con sus rivales de terna es Leonardo Farinella, ganador entonces indiscutible del Passucci de Oro 2011.
Claramente el voto Passucci vio en este referente del mundo River, a alguien que aporta su granito de arena para que River esté como esté. Y no hablamos de haberse ido a la B, cosa que deportivamente le puede pasar a cualquiera. Nos referimos a vendarle los ojos a sus hinchas, de hablarle de Aruba, de Shrek y de entradas vendidas mientras todos vemos la realidad. Todos menos el hincha de River, claro.

Gracias a todos los Passuccis que votaron. Muy feliz 2012 para todos.!!

viernes, 30 de diciembre de 2011

Los personajes de 2011 en La Passucci coinciden sobre el Jugador -1

Se va el año nomás. Un gran año. Que para La Passucci empezó oficialmente allá por mediados de mayo cuando nos juntamos en una pizzería, y días antes del superclásico del Clausura, nos juramentamos empezar a trabar de cabeza por la mística boquense. Y tras aquel partido, que vino a ser un guiño del destino, pusimos manos a la obra. ¿Por qué un guiño del destino? No por el triunfo 2 a 0. Ver al Jugador -1 en silencio durante los 90 minutos y que les den el “Premio al aliento” nos hizo tomar conciencia de la gravedad del asunto. Y nos terminó de convencer de que la mística boquense, evidentemente un objeto de deseo, iba a ser manoseada por gente inescrupulosa.
Pasaron los meses y los motivos para festejar empezaron a crecer como zapallos (?). Y entre Boca campeón, las tapas del Olé de Farinella y el nivel del Calcio, hay uno que es el que más nos moviliza: hacer día a día algo que nos permite dormir en paz. Documentar siempre con la verdad la diferencia entre Boca, un verdadero fenómeno popular desde 1905, y River, el supuesto fenómeno popular que desde fines de 2008 trata de imponer por la fuerza La Corpo mediática.
Así que como estamos contentos y nos enseñaron que en esta vida hay que ser agradecidos, queremos devolver algo de nuestra felicidad. rindiéndole una especie de homenaje a aquellos personajes que desfilaron este año por La Passucci diciendo la verdad. Por supuesto hicimos una elección de los que a nuestro criterio fueron los personajes más significativos. Pero todos con algo en común. Que a la hora de hablar de River hablaron de frialdad, falta de apoyo, silencio, escaso aliento en las tribunas, de hinchas gallinas, de gente amarga que insulta, tira monedazos, exige, agrede, hostiga. Y es más, algunos hasta se refirieron a la gente de Boca, reconociendo sin problemas que el Número 12 es inigualable a la hora de alentar a su equipo y de ayudar a ganar partidos. Suena muy duro, pero es la verdad. Y no lo decimos nosotros. Lo dicen ellos. Por las dudas y como sabemos de muchos hinchas de River que se resisten a creernos, haciendo clic sobre cada foto se podrá leer las respectivas pruebas. Lo que se dice, un baño de realidad bestial.


El Beto Alonso, D'Alessandro, Passarella, Ayala, Amadeo Carrizo, el Tolo Gallego, Labruna, Francescoli, Pumpido y Jota Jota. Estos son los 10 personajes de 2011 en La Passucci.
Y nos dimos el enorme lujo de, todavía, no citar a Ahumada. Ya lo vamos a hacer, pero no nos vamos a limitar a repetir sus dichos. Para el caso Ahumada hay una comisión especial preparando una superproducción histórica. Por el momento más no podemos decir.
¡Feliz año nuevo para todos los Passuccis! Y a trabar más fuerte que nunca en 2012.

miércoles, 28 de diciembre de 2011

El Passucci Giunta

La clave para que tipos como Blas Armando Giunta sean palabra santa en Boca, no es pegar un par de patadas. Eso lo puede hacer cualquiera. De hecho, hasta un jugador de River puede querer vender humo y hacerse el loquito.
Acá estamos hablando de otra cosa. De jugar con la camiseta de Boca, tal como juega la hinchada boquense en las tribunas. Dando todo y un poco más. De representar al hincha de Boca dentro del campo de juego. Es muy fácil la ecuación. Una hinchada que alienta incondicionalmente hasta convertirse en un jugador más, que es sinónimo de garra, de pasión, de no bajar los brazos ante la adversidad, quiere ver jugadores con esas características vistiendo la camiseta de Boca. Y el Passucci Giunta era todo eso y algo más. Jugaba con las revoluciones pasadas. Algo que para otras hinchadas que seguramente priorizan lo racional, puede ser criticable por una eventual expulsión. Hay que ser tibios para pensar así eh... Acá priorizamos el corazón por sobre la razón. Y tener en Boca a tipos que piensen así es un honor. Veamos dos ejemplos del Passucci Giunta en acción:

4 de noviembre de 1989, cancha de Huracán. San Lorenzo 2 - Boca 2. Un policía trató de esconder la pelota para demorar la reanudación del juego.

16 de mayo de 1992, Bombonera. Boca no le pudo ganar a Newells y desperdició una gran chance de alcanzarlo en la punta, cosa que empezó a poner el Clausura 92 cuesta arriba. El Pájaro Domizzi habló de más con el partido terminado y tuvo que salir corriendo hacia los vestuarios.

Como vemos, el Passucci Giunta no contempló expulsiones ni sanciones de oficio. Actuó con el corazón. Que otras hinchadas desprecien a esta clase de jugadores no hace otra cosa que confirmar que el hincha de Boca es único. Somos nosotros los que valoramos a los tipos que se esfuerzan, que luchan, que ponen lo que hay poner y nunca se dan por vencidos defendiendo la camiseta de Boca. ¿Por qué? Porque así somos nosotros. Como fue el Passucci Giunta.

martes, 27 de diciembre de 2011

Hay que ser muy inocente eh...






Todo nuestro apoyo y solidaridad a quienes no hace falta que sea un 28 de diciembre para que sean víctimas de bromas y chistes de mal gusto por parte de los medios de comunicación.
En La Passucci creemos que este tipo de sentido del humor no es sano. Y jugar con la desesperación de la gente es un límite que no hay que cruzar jamás. Que no se repita.

lunes, 26 de diciembre de 2011

Revista partidaria pide usar parlantes para alentar 1981

Mayo de 1981. Pese a ser tricampeón vigente en el fútbol argentino, se vivían momentos difíciles en River. Eliminado de la Libertadores y con un arranque irregular en el Metro que punteaba el Boca de Maradona y Brindisi, el Jugador -1 había tomado el 21 de abril la drástica decisión de no ir más a la cancha.
El abandona de la hinchada de River duró un tiempo largo. Semanas en las cuales desde la revista partidaria River se fantaseó con la posibilidad de usar un disco y pasarlo por altoparlantes en el Monumental para simular en aliento de los hinchas que no iban y dejabansu cancha vacía.
Gloriosas palabras de Norberto Noguera, años más tarde dirigente de River y hasta candidato a vicepresidente de Hugo Santilli. O sea que estamos hablando de un tipo con años de conocimiento en el mundo River.
De yapa vemos que se regalaban plateas a mansalva y que la ausencia casi total del público de River de la tribuna era por estar "tristes y amargados".
Queridos Passuccis, disfrutemos hasta el hartazgo el ser hinchas de Boca. Nadie, pero nadie en serio, puede señalar con el dedo al Jugador Nro. 12. Y mucho menos un hincha de River.
Fuente: revista River número 1894 correspondiente al 19 de mayo de 1981.

domingo, 25 de diciembre de 2011

Platea de River emocionada 1985

29 de septiembre de 1985, estadio Monumental. River barre a Newells goleándolo 5 a 1. Y a la revista El Gráfico le llama poderosamente la atención que los dos últimos goles millonarios, sobre la hora, hayan desatado algo de euforia en "ese particular auditorio que por fin dejó de ser un cine".
Nada más para agregar. Sólo que el hincha de Boca, el de tribuna, el de platea, el que se queda en casa escuchando la radio es pura pasión.
Fuente: revista El Gráfico número 3443 correspondiente al 1 de octubre de 1985.

viernes, 23 de diciembre de 2011

El día que el Jugador Nro. 12 salió campeón del mundo

Defender la mística boquense, no solo lo disfrutamos sino que por suerte no nos representa un gran esfuerzo. Con mostrar hechos, con exponer verdades, alcanza y sobra. Es fácil. Después están los que aceptan la realidad y los que tratan de negarla, photoshopearla o esconderla. Una lástima por ellos y por lo triste que debe ser eso. Pero no nos vayamos del tema. Hoy vamos a hablar del día que el Jugador Nro. 12 se consagró como campeón del mundo.
En la historia de la Copa Intercontinental con la modalidad de un solo partido disputado en Japón, competición que tuvo su lugar entre 1980 y 2004, un total de 32 clubes tuvieron el honor de disputarla. Hablamos de honor, más allá del rival que tocara en suerte, porque futbolísticamente a nivel clubes, era el trofeo más importante. Algunos equipos fueron a Japón en varias ocasiones, otros una sola vez. 
El 28 de noviembre de 2000 le tocó el turno a Boca por primera vez en su historia ya que la Copa Intercontinental 1977 fue ganada como visitante en Alemania, tras el partido de ida contra el Borussia Moenchengladbach en la Bombonera.
Hay que reconocer que tener como rival al Real Madrid en pleno amanecer de la era galáctica, le dio bastante más brillo a esa final. Si enfrente hubiera estado un Steaua Bucarest equipo con menos gloria, seguramente no hubiera sido lo mismo. La cosa es que con dos goles de Palermo en el arranque, Boca golpeó primero y terminó ganando aquel histórico partido por 2 a 1.
La Passucci toma ese logro de Boca y lo celebra como algo muy importante en la historia del club. Es innegable. Pero ojo que es un logro que muchos otros equipos han logrado. Incluso equipos de la B han llegado a consagrarse campeones del mundo en Japón. ¿A dónde queremos llegar? A que ese día ocurrió otro hecho muy significativo en la historia de Boca. A algo que hace única e inigualable a su hinchada. Ese 28 de noviembre de 2000 pasó algo tan importante como levantar la Intercontinental. Ese día, antes de comenzar el partido, el Jugador Nro. 12 también salió campeón del mundo. Así de clarito.
Porque el estadio Nacional de Tokio mostró un marco jamás visto en ese tipo de finales. Un marco multitudinario de hinchas, banderas, globos, sombrillas, telones y bombos. Algo inédito y que sólo el Jugador Nro. 12 pudo provocar. Estamos hablando de movilizar miles y miles de personas hasta el otro lado del planeta Tierra para alentar a su equipo. Sólo Boca lo hizo.
¿Cuántos hinchas de Boca hubo? 10.000. Una cifra aplastante a la que otros clubes ni yendo dos veces pudieron aunque sea llegar al 10% de ese número. Esto es así. Ningún otro club en la historia movilizó tanta gente. Y eso que tuvieron su oportunidad los hinchas de Nacional de Montevideo, Nottingham Forest, Flamengo, Liverpool, Peñarol, Aston Villa, Gremio, Hamburgo, Independiente, Argentinos Juniors, Juventus, River, Steaua Bucarest, Porto, PSV Eindhoven, Milan, Atlético Nacional de Medellín, Olimpia de Paraguay, Estrrella Roja de la hoy desaparecida Yugoslavia, Colo Colo, San Pablo, Barcelona, Vélez, Ajax, Borussia Dortmund, Cruzeiro, Real Madrid, Vasco da Gama, Manchester United, Palmeiras, Bayern Munich y Once Caldas. 32 clubes, 32 hinchadas. Ninguna le llega a los tobillos al Jugador Nro. 12.

El Jugador Nro. 12 tuvo su oportunidad de consagrarse campeón del mundo como hinchada y la aprovechó. Demostró su apoyo masivo e incondicional a Boca y dijo presente a miles de kilómetros de distancia.
Por si a alguien le hacía falta una prueba más del fervor boquense. Un fervor que tiene más de 100 años de historia y se manifiesta en forma espontánea sin necesidad de ser agitado desde titulares de diarios o páginas de internet.
Para el final queremos rogarles a los hinchas de River expertos en buscar excusas, que en esta oportunidad se esmeren para explicar lo que ponemos a continuación. Acá no sirve hablar de que estaba nublado, llovía o de las variables macroeconómicas y su impacto en los mercados bursátiles.



La hinchada de River, con el Plan Austral o en pleno apogeo del 1 a 1, dio lástima en Japón. Una verguenza que no estuvo ni cerca del Jugador Nro. 12.
Gracias al Passucci Jorge Comas por la colaboración.

jueves, 22 de diciembre de 2011

Invasión monumental 1987

13 de abril de 1987, estadio Monumental. Un nuevo superclásico jugado en Núñez donde hubo más hinchas de Boca que de River. Nada del otro mundo, porque hasta que empezó a limitarse el ingreso de público visitante a los estadios, era algo muy común. Esa noche, al igual que lo sucedido en 1988, los boquenses llenaron la Centenario Alta y Baja, Belgrano Alta y Baja y metieron gente hasta en la San Martín.



Pero en esta oportunidad, fecha 36 de la temporada 1986/87, el copamiento del Monumental contó con un agregado demoledor, que enaltece aún más la gesta del Jugador Nro. 12. En la San Martín Baja, casi arriba mismo del túnel local por donde salió River, se colgó una bandera azul y oro.



Cuando decimos que la hinchada de Boca tiene sobre el lomo décadas y décadas de mística, nos referimos a jornadas como ésta. Una constante que se repitió desde la misma fundación del club. El Jugador Nro. 12 no es una moda en tiempos que todas las hinchadas llevan la misma cantidad de gente como visitante. Una época donde de local hasta los Vélez, Newells, Unión y River llenan sus canchas. Hoy día está de moda ir a la cancha. Está socialmente bien visto.
El Jugador Nro. 12 fue, es y será por siempre el verdadero fenómeno popular del fútbol argentino porque en las épocas donde nadie iba a las canchas, cantaba presente moviendo verdaderas multitudes donde sea. Y metía más gente que River en su propia cancha y le hacía temblar de una vez por todas esa pista de atletismo. ¿Estamos exagerando? Ni un poco.



Dejemos que el Jugador -1 siga hablando de parlantes que de algo tienen que hablar. Por suerte los hinchas de Boca podemos hablar de cosas concretas, como colgar banderas de Boca en la San Martín y haberlos hecho sentir visitantes en su propia cancha. Algo que jamás, pero jamás de los jamases, el Jugador -1 pudo hacer en la Bombonera.

martes, 20 de diciembre de 2011

Ángel Labruna enojado con hinchada por falta de aliento 1980

27 de febrero de 1980, estadio Monumental. River debuta en la Libertadores empatando 0-0 con Vélez. El final del aburrido partido, encuentra a las tribunas en el más absoluto de los silencios. Lo que indignó sobremanera al DT millonario Ángel Labruna.
El Feo, máximo ídolo de la historia de River, no anduvo con vueltas y casi que se anticipó 28 años a los dichos de Ahumada hablando sobre el notorio silencio del Jugador -1. Algo que pasarán los años pero es la marca indeleble de la hinchada de River. Pese a quien le pese.
Fuente: revista El Gráfico número 3152 correspondiente al 4 de marzo de 1980.

domingo, 18 de diciembre de 2011

Boca, la única hinchada con más de 50 millones de entradas vendidas en la historia del profesionalismo

Parece que La Corpo de River también tenía su Especial de Navidad preparado. Y actuó en consecuencia. Entre el jueves 15 y el viernes 16 de diciembre de 2011 tiraron cajas enteras de pirotecnia entre las cuales había cañitas voladoras, tres tiros, rompeportones y la vedette (?) de estas fiestas: tablas de entradas vendidas.
El humo de las explosiones tardó horas en disiparse y provocó un efecto molesto: una interminable fila de simpatizantes millonarios en nuestros facebook, twitter, mail y blog para repetir como loritos lo que les dice Olé sobre las entradas vendidas en el segundo semestre de 2011. Pero ¿saben qué, señores? Eso, al hincha de Boca, al verdadero hincha de Boca no le hace ni cosquillas. Porque por si no sabían, la hinchada que vendió más entradas en la historia del fútbol argentino sigue siendo el Jugador Nro. 12. Así de clarito. Alguien tiene que decir las cosas como son. Cuando Boca y River vendieron entradas a la par, Boca arrasó durante toda la vida. Las más de 50 millones de entradas vendidas no las van a poder borrar nunca. Por más canales de televisión, diarios, radios, webs y la mar en coche que digiten.

Diario Olé de 2007. Obviamente estamos hablando de épocas donde Farinella no era el director.

Que nadie le conteste en sus programas a los Recondo o a los Costafebre, no significa que el hincha de River sea un fenómeno social ni mucho menos. En todo caso, el fenómeno está sucediendo en los medios de comunicación.
Ahí si el hincha de River copó la parada como nunca. Con Farinella en Olé, Castillo y Yarroch en Clarín, más los ya nombrados Costafebre, Recondo y hasta una segunda línea con los Nacho Goano y Cortese. Lo que hace un tiempo hemos bautizado como La Corpo de River. Un grupo de gente con acceso a medios de comunicación masivos que en lugar de informar, hacen un diario de Yrigoyen para que el simpatizante millonario pueda sentirse feliz. Y gracias a esa Corpo que vende espejitos de colores las 24 horas al día, River está donde está. Porque esos medios fueron los que vendiendo una realidad paralela, impidieron que el hincha millonario se diera cuenta lo que estaba pasando. Los tuvieron ocupados con recaudaciones, pasión, ídolos, tiki tiki, ogros y enanos. Circo. Un mundo de ficción donde todo era color de rosa.
Y por estas horas La Corpo redobla la apuesta. Los quieren convencer de que en la B se juega mejor, es más apasionante, está más jerarquizada, se venden más entradas, se pega menos. Hasta se habla de Calcio y de Europa League. Que increíbles que son...
Hay que reconocer que el trabajo de La Corpo fue por demás exitoso. Enterró el paladar negro e inventó otro River. Impuso a Fionna y las máscaras de Shrek en la San Martín, una platea históricamente exigente hasta con los Pedernera, Moreno y Labruna. Esa Corpo hizo que Gerlo fuera ovacionado provocando tal grado de confusión en el hincha  de River que hoy no sabe donde está parado. Los más grandes miran y no entienden nada. Los más chicos han sido racinguizados sin que se den cuenta y solo hablan de recaudaciones. Y los del medio, están divididos. Algunos quieren volver al paladar negro, hablan de recuperar la San Martín, pero no saben como hacer ante la gigantesca operación mediática. Y otros empiezan a sentirse cómodos en ser hinchas de la hinchada. Si este escenario es dramático, no queremos imaginar al hincha de River dentro de 15 o 20 años. Va a ser para alquilar balcones, porque hay toda una generación que se está forjando con el Olé bajo el brazo. Va a estar muy bueno ver eso.
Todo bien. Sigan hablando día y noche de entradas vendidas pero sepan una cosa. Renegar de lo que uno fue es lamentable. Y hay algo peor. No asumirlo, no decirlo, hacerse el distraido. River siempre despreció la popularidad. Y ahora, de repente, quiere arriar esa bandera con orgullo. Qué caraduras por favor. ¿Qué pasó ahora? ¿Salieron del placard? Pero tranquilos. Cuando a los hinchas de Boca nos vuelvan a vender entradas las vamos a comprar. En cambio ustedes, para volver al River del paladar negro van a tener que rezar día y noche. Les deseamos suerte. Mientras tanto traten de llegar a las 50 millones de entradas vendidas.
Ah (?), antes que nos olvidemos. Sepan que en La Passucci cuánto más distorsionen la realidad, más les vamos a recordar cómo fue el hincha de River desde su fundación hasta que La Corpo lo racinguizó. Un tipo que jamás se interesó en hablar de tribunas llenas.

Para el final, un desafío a La Corpo que jamás aclarará que River vendió más entradas que Boca en el segundo semestre de 2011, porque Boca no vende de local y tiene la capacidad restringida como visitante. Eso mejor ni decirlo así el hincha de River sigue de festejos (?):

1) Miren como empezó el Jugador -1 su camino en la B.
http://www.clarin.com/deportes/stylecolorBF1424RiveribrPoco-movimiento-venta-entradas-Nacional_0_535146754.html

2) Y miren cómo terminó.

3) Y miren las cosas que pasaron en el medio:

¿Saben cuántos años podría llevar aproximadamente que River supere a Boca en cantidad de entradas vendidas? Hagan la cuenta y traten de no desmayarse. Van a tener que laburar muchísimo.
Al ritmo que vienen, con miles de entradas devueltas contra Independiente de Mendoza, Merlo, Ferro, Gimnasia, Atlanta, las plateas caras (?) de Huracán, la cosa viene muy complicada. Pero shhhh, no importa, no digamos nada. Total la pasión no sabe de categorías.
El día que River pase la barrera de las 50 millones de entradas vendidas como tiene el Jugador Nro. 12, ese día, seguimos hablando. Chau, felicidades (?)...!!!