3 de mayo de 1992, estadio Monumental. Boca visita a River promediando el torneo Clausura en un partido clave por la lucha del título que finalmente se llevaría el tercero en discordia: el Newell's de Bielsa.
La cosa es que casi desde el vestuario, a los 2 minutos de iniciado el superclásico, Latorre desparramó a Higuaín y definió ante Comizzo para abrir el marcador.
Y los hinchas de Boca, que habían copado un poco más de la mitad del estadio, le hicieron sentir el rigor a los locales de lo que es una hinchada en serio.
La nota habla de un temblor de tierra ante una tribuna local muda, quieta y congelada. Una tribuna local parecida a una foto. Algo que al revés nunca pasó y nunca pasará. ¿O alguien puede imaginar un gol de River y a su gente provocando un temblor mientras la hinchada de Boca se queda congelada? Imposible.
Pero ojo que hoy viene un diario deportivo folclórico y con 2 o 3 tapas nos quiere envolver en sus mentiras y construir una realidad paralela. Que los hinchas de River 2.0 sigan viviendo en ese mundo de fantasía. Que los de Boca, si vamos a hablar de aliento en las tribunas, tenemos a la verdad de nuestro lado. Y no vamos a permitir que nadie quiera falsearla.
Fuente: revista El Gráfico número 3787 correspondiente al 5 de mayo de 1992.