Resulta que estábamos escuchando a los pibes de Muy Boca Radio (lunes 22 hs por Deporvox) cuando la copada de Diana apareció de la nada (?) y tuvo un micrófono a disposición para hablar y ser entrevistada. Frase va, frase viene, pudimos escuchar (link) un par de veces que el objetivo de usar un color ajeno a la historia de Boca fue ser disruptivo.
La cosa es que ya tantas veces escuchamos la palabra disruptivo como justificación a lo que a nosotros nos apreció un atropello de color violeta, que empezamos a hojear libros al respecto.
La primera sorpresa fue que el verbo “disrumpir” no existe en el Diccionario de la RAE. Lo que sí encontramos fue el adjetivo "disruptivo":
1. adj. Fís. Que produce ruptura brusca (link)
Pero seguimos leyendo y no podemos pasar por alto esta interesante definición:
"El concepto "disrupción" (Benyakar, 1973). Propongo usar el término 'disruptivo' para reemplazar la palabra 'traumático' cada vez que hablamos de los hechos y las situaciones que ocurren en el mundo externo. En latín dirumpo significa destrozar, hacer pedazos, romper, destruir, establecer discontinuidad. Por lo tanto disruptivo será todo evento o situación con la capacidad potencial de irrumpir en el psiquismo y producir reacciones que alteren su capacidad integradora y de elaboración."
Benyamar, Moty. Lo Disruptivo — Amenazas individuales y colectivas: el psiquismo ante guerras, terrorismo y catástrofes. 2006
La camiseta violeta, más allá de ser linda o fea, no es de Boca. Y tenemos la sospecha de que lo que se hizo, muy sútilmente, fue “destrozar en forma traumática” la camiseta de Boca. Pero como dijo Diana, con respeto (?).
El resto de la entrevista, muy esclarecedora, consistió básicamente en una escalofriante apertura de paraguas sobre lo que ella bautizó “una nueva etapa en Boca”. Seguramente con más disrupciones, más colores y mucho más hinchas comprando y formando los domingos a la tarde un verdadero mosaico de colores en la Bombonera.
Mientras tanto esperamos ansiosos a enero de 2014 para ver como nos vuelven a disrumpir nuestra querida y gloriosa camiseta.
