viernes, 16 de diciembre de 2011

El día internacional del hincha de River es el día internacional del hipócrita

Desde su inauguración hace apenas un par de años, el día internacional del hincha de River toma cada vez mayor trascendencia. Ojo, no es que el mundo se rinda a sus pies ni mucho menos. Sólo que algunos medios de comunicación, más precisamente la Corpo de River, arenga a tres manos para seguir construyendo una realidad paralela.  ¿Qué se busca exactamente en esta oportunidad? Mostrar al simpatizante millonario como alguien agradecido y que quiere honrar al probablemente mayor ídolo que vistió camiseta de River: Ángel Amadeo Labruna. Pero, lamentamos informar una vez más, que no todo lo que brilla es oro. El hincha de River no sólo es bastante desagradecido sino algo peor: es muy hipócrita.
Hipócrita es todo aquel que actúa con hipocresía. Según el diccionario de la Real Academia Española, la hipocresía es fingir cualidades o sentimientos contrarios a los que verdaderamente se tienen o experimentan. Eso es el hincha de River. Alguien que ahora, de repente, finge un sentimiento de amor hacia Labruna poniendo su fecha de nacimiento como el día internacional del hincha de River, pero que cuando tuvo la oportunidad de demostrarle todo su cariño y respeto, no sólo no lo hizo sino que hasta eligió el camino contrario: atacarlo, herirlo, insultarlo, humillarlo. De muchas y variadas formas, pero todas con algo en común: lastimar a Labruna.
No nos vamos a poner a defender a Angelito, faltaba más (?), pero si algo tenemos que reconocer es que este tipo destiló River por cada uno de sus poros. Un tipo que se puso la camiseta millonaria durante 20 años, contabilizando 515 partidos oficiales. Máximo goleador de la institución de Núñez y máximo goleador en la historia del superclásico. Una gloria riverplatense que fue multiampeón como jugador de la recordada Máquina y también como director técnico, siendo el encargado de acabar con la sequía de 18 años sin campeonatos. Labruna entraba a la Bombonera y no se tapaba la nariz para vender humo. El Feo se tapaba la nariz frente al Jugador Nro. 12 porque así lo sentía su corazón. La cancha de Boca se le venía encima y Labruna se plantaba tirando cortes de manga hacia Casa Amarilla. 
Bueno, a ese tipo, los hinchas de River, los que supuestamente son agradecidos y respetuosos de sus ídolos, se cansaron de insultarlo.
Si usted es hincha de River y no quiere morirse de vergüenza, le recomendamos de todo corazón no seguir leyendo. Háganos caso.


21 de Abril de 1981, estadio Monumental. Una prueba más de lo que son capaces de hacer los hinchas de River ante un revés deportivo. En ocasión de uno de sus tantas eliminaciones de Copa Libertadores, en lugar de alentar en las malas, agredieron al DT de su equipo, Ángel Labruna, sí, a Labruna, arrojando monedas y cantando “Toto Lorenzo” en clara postura de provocarlo y humillarlo. 
Repetimos para que no queden dudas. Los hinchas de River se ensañaron con el Feo. Realmente no encontramos palabras para describir semejante actitud. El Jugador -1 en su máxima expresión.
Fuente: revista El Gráfico número 3212, correspondiente al 28 de abril de 1981.

Abril de 1981. Tras perder por goleada en la Bombonera contra el Boca de Maradona y Brindisi, le preguntan a Labruna cuáles eran los tres problemas esenciales de aquel River. Y el director técnico no duda en mencionar la falta de gol, las lesiones y... (redoblantes por favor)... la falta de apoyo de los hinchas de River.
Sí señores, una vez más, la falta de apoyo del Jugador -1 es tema de conversación en boca de una figura millonaria. En este caso, en boca del Feo, probablemente el mayor ídolo en la historia de River. Que Labruna tenga pedir por favor que los hinchas apoyen es casi una declaración de principios de cómo es el hincha millonario. Ojo, un hincha que venía de ser tricampeón.
Fuente: revista El Gráfico número 3210, correspondiente al 14 de abril de 1981.

6 de julio de 1980, cancha de Vélez. Labruna siempre fue hostigado e insultado por la platea de River. Pero por la popular también. En el Metro 80, por no poner al uruguayo Carrasco contra Vélez, fue silbado e insultado en masa por toda la hinchada de River. Un momento tremendo en el que Labruna hasta le cointestó con gestos en el campo de juego y con declaraciones lapidarias en los vestuarios.
Fuente: revista El Gráfico número 3170 correspondiente al 8 de julio de 1980.

Septiembre de 1980. Insultarlo a Labruna en un estadio es una mancha indeleble en el Jugador -1. Ahora, que un hincha de River sea capaz de ir hasta la casa del Feo y tirarle alquitrán en la puerta por no darle cabida a Carrasco en el equipo, es un disparate. Justo a Labruna hacerle eso. Hay que ser desagradecido eh...
Fuente: revista El Gráfico número 3180 correspondiente al 16 de septiembre de 1980.

17 de mayo de 1981, estadio Monumental. River perdió 5 a 2 contra Instituto y el horno no estuvo para bollos. Tercera caída consecutiva que terminó en monedazos a los jugadores y una toma del Hall para insultar a Labruna y pedirle la renuncia. Lo que habrá sufrido Angelito esa tarde.
Fuente: revista River número 1894 correspondiente al 19 de mayo de 1981.

Labruna falleció el 19 de septiembre de 1983 y sus restos fueron velados en el mismo estadio Monumental. Las últimas campañas como director técnico de Talleres y Argentinos fueron más que aceptables, pero el sueño de su vida era volver a dirigir a River. Volver a sacarlo campeón y por qué no, volver para reconciliarse de una vez por todas con la hinchada millonaria. No pudo ser.